En su 85 aniversario, la CFE se mantiene como una empresa sin fines de lucro, con autonomía y con un objetivo social.
Una de las prioridades del presidente López Obrador ha sido el rescate de la CFE. Hoy más que nunca, la empresa trabaja para fortalecer su capacidad de generación, además ha implementado medidas contra la corrupción, tiene un mayor control de sus compras y maneja responsablemente sus ingresos.
Proveerá conectividad de internet a zonas rurales donde a empresas privadas no les es redituable llevar ese servicio.
Renegoció contratos inequitativos de construcción y operación de siete gasoductos, con lo que logró un ahorro de 4,500 millones de dólares y garantiza por más años la provisión de gas natural para la generación de electricidad.
Construye proyectos de energía con perspectiva de género y beneficia a comunidades rurales con la instalación de paneles solares.
Se encamina a la transición energética mediante la construcción de más centrales de generación limpia y la modernización de sus centrales hidroeléctricas.
Además, con la aprobación de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, se equilibra el despacho de la generación de energía, se elimina la obligación de comprar energía a privados mediante subastas y se cancelan los permisos fraudulentos de autoabastecimiento.
Hoy la CFE es una empresa generadora de electricidad cuya capacidad garantiza el suministro eléctrico sin aumentos en el precio de la luz para los usuarios.
CFE, pilar del desarrollo y soberanía del país.
Comisión Federal de Electricidad, 85 años iluminando la historia de México.